Mi pasión inadecuada… Mi pasión… ogro que devora las venas de mi pensamiento. Terremoto que inunda de placer la aorta de mis sueños. Mi pasión… maleducada niña que juega entre tus piernas. Mosca cojonera que te silba el recuerdo de mi piel. Mi pasión inadecuada……
Ha llegado la pérfida nostalgia, el no pienses en mí y el nunca podré olvidarte. Han llegado los paseos de viuda (ojalá que alegre), los recuerdos como esquilas y los mensajes infectados de preguntas ocultas (y de amor, mi amor, de mucho amor…). Ha llegado, sin…
Te quiere mandar al infierno, aunque ya vives en él Al arrancarte el brazo, extirpaba de su cerebro tus caricias. Al quebrarte el cuello –dulce guarida de beso y gritos ahogados— te condenaba al silencio. Al rajar tu pierna —aún tan blanca— te dividía (la vida) en…
Yolanda, es que no te aclaras… Ya sé que no es sano soñar a gritos o levantarse pensando que tú sola, loca bruja a la que durante años nadie hizo caso, eres capaz de cambiar el mundo (chocolate con churros). Sé, también, que sonreír como si la vida…
Jugamos a amarnos hasta rompernos. A cambiar nuestras camisas y nuestra saliva (también nuestras posturas). Jugamos a inventar un mundo donde podríamos vivir juntos (¿qué tal seis meses en mis sueños y otros seis en los tuyos?). Jugamos también —que no me olvide— a llorar de amor mientras…
Nunca conté las veces que me caí; ya estabais vosotros para hacerlo. Pensándolo bien, no quiero ser superproductiva (te ha costado llegar a ello, Yolanda), ni la más delgada del baile. Tampoco quiero tener esa casa de ensueño si me impide vivir en otros apartamentos con…
Me pesa tanto amarte… Y es eso, ladrón, que, desde que has entrado en mí, me has saqueado. Con tus tormentas y tus desiertos, con tus regalos y tus abrazos, con tus me muero por verte y con tus no sé, mi hembra, cómo puedes vivir sin mí….
Levanta la cabeza Solo te quedaste con el diablo que veías entre mis piernas cada vez que entrabas. Oíste los gritos de sirenas envidiosas, en lugar de bañarte en los míos (por todos los demonios, con lo que yo te he amado). Dejaste las frases…
¿Dónde muere un amanecer…? Toda la vida viajando a través de las puestas de sol más hermosas para descubrir que el atardecer más salvaje estaba en tu espalda. No fue el restaurante más hermoso, ni el agua de la playa era la más bendita. No tenían el…
Yo soy chula, tela… Sé que nunca encontrarás a nadie que te anegue de amor como yo, ni que te mande cajas crecidas de regalos y de ternura (de sexo, también). Sé que a ninguna le quedarán los vestidos que eliges como a mí y que…