Estoy en la mudez de mi te quiero,
callado en la metáfora enfermiza,
sobre la exhausta luz que se desliza
del último renglón hasta el primero.
Estoy en tu silencio, en él espero
y en él mi corazón se cristaliza,
se rompe, se desangra, cicatriza
envuelto en el mutismo mensajero.
Escúchame y recita lentamente,
es el último acento que reclamo
y la exigua razón que me convoca.
Tal vez, en este instante indiferente,
ignores que soy verso y me derramo
sobre el aire invisible de tu boca.
Luis Oroz
No puede negarse que eres verso, Luis. Me encanta esa gradación «y en él mi corazón se cristaliza, / se rompe, se desangra, cicatriza».
Muchas gracias por no quedarte mudo.