Ceguera digital. Por Juan José Díez

Durante los primeros días del año se ha reavivado el eterno tema de la cobardía de las editoriales tradicionales españolas ante el reto del libro digital. Ninguna de ellas ha apostado por asomar la patita para ver cómo podrían capear el ciclón que se está fraguando.
En el blog eConectados ha aparecido el 2 de Enero una polémica entrada: Los editores españoles van a equivocarse con el ebook. Las ideas fundamentales son dos: los ereaders tienen tantas ventajas, que cuando se abaraten y mejoren sus funciones, barrerán al libro de papel (de hecho Amazon ha vendido más Dan Brown como libro digital que en códice) y dos: si las editoriales no ofrecen sus textos para  los dispositivos  lectores a un precio realmente competitivo, los usuarios terminarán (ya de hecho lo hacen) pirateándolos en las cada vez más numerosas y surtidas webs de descargas gratuitas.
En el blog Mi mesa cojea, el 4 de Enero, se publica la entrada: Ebooks gratis  en la que el autor declara:
«En estos momentos, en mi Kindle hay 10 libros en castellano. No he pagado por ninguno de ellos, aunque lo he intentado. Lo he intentado en la web de Amazon, en la de El Corte Inglés, en la de La Casa del Libro y en las de las propias editoriales. También lo he intentado a lo loco, a través de Google. Nada. No he podido pagar por ninguno de ellos porque las editoriales de España han sucumbido a una especie de terror, de negación absurda a lo evidente. Los ebooks, para ellos, no existen.»

Antes, el día 2, el mismo autor había mantenido una polémica en Twitter con algunos editores a raíz  de este gorjeo: «Editoriales de España: la ausencia de ebooks en vuestros catálogos me está obligando a descargarlos sin pagar. Enhorabuena y gracias.»

Jorge Ledo, en su blog Ficta Eloquentia, se hace eco del debate y el 5 de Enero publica  El libro digital, España y el modelo americano, donde aporta unos sabios consejos a las editoriales. Cree que la literatura de consumo será pirateada «de manera inmisericorde», pero a diferencia de las discográficas, las editoriales tienen la baza de la edición digital seria y referenciada de muchas obras de sus fondos que tendrían un amplio público académico que no puede conseguirlas por estar descatalogadas.

La viveza y variedad de los comentarios a todas estas entradas aporta una dimensión iluminadora, y muchas veces divertida, que es indispensable conocer también.

Juan José Díez

Fuente: http://webliter.blogspot.com/2010/01/ceguera-digital.html

2 comentarios:

  1. Me ha parecido muy interesante y clarificador este artículo. Y es que para quienes como yo aun no concebimos el libro sin otra textura que la del papel, esto nos abre los ojos. Veo películas, escucho música, leo artículos y reportajes, pero nunca un libro.
    Gracias por él.

  2. No es de extrañar la actitud de las empresas editoriales en castellano. Tenemos tendencia a temer al futuro aunque no sea incierto. Soy de los que opina que el libro digital tardará en barrer al papel pero su comercialización será creciente y a la vez inexorable.

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