Amistad y soledad. Por Daniele Branchina

Dos  caras de la misma moneda. Cuando existe una, la otra desaparece. Qué fácil es evitar la soledad entonces ¿verdad? Solo necesitamos alguna que otra amistad que nos haga compañía. Pero a veces la suerte no está de nuestra parte, y por más que lo intentes sólo sale cruz.

Amigo se le puede llamar a cualquiera: a ese que te ha invitado a un chupito, a aquel que juega contigo a veces al fútbol, tus compañeros de clase…  Pero cuando te propones comprobarlo, sigue siendo cruz.

A pesar de ello, la probabilidad te da algún respiro, y de vez en cuando encuentras una persona con la que te sientes cómodo y con quien está decidido a realizar una última prueba.  Esta vez es cara.

Pero los amigos, al igual que muchas cosas, van y vienen, y en un momento has vuelto a como estabas en un principio.

Vuelta a empezar, pero sabes que un día u otro la vida te traerá una nueva cara por conocer.

BÚSCALA.

Daniele Branchina
Blog: El Poder de las palabras.

Un comentario:

  1. Suerte que entre tanta cruz, aparece alguna CARA de buena calidad de vez en cuando 🙂

Responder a Pilar Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *