Extraña paradoja se da en la puebla
pues elementos en discordia eterna viven,
a la par que seglares y freiles de consistente habla
de argumentos y almas consistentes mueren.
La humildad se corrompe fácilmente,
lo sabe el pelota que llena su alacena con halagos,
al bachiller diciéndole licenciado le seduce suavemente,
al bisojo bizco, y a los tramposos magos.
Dice la viuda triste en el entierro de su marido
¿ Y he de vivir?
Y solo ella sabe que está sarmentosa por calentura de varón fornido,
y sin sitio donde ir.
Dice el maestrazgo que quienes están a nuestro lado son parte de nuestro ser,
nos remodelan.
Perdida está la gente que nace con posibles y poder
si no cuentan con quienes les rodean .
Hemos de ser abiertos a nuestros amigos,
pues pueblo sin río, pueblo de pozos;
Quienes son invitados a humildes comidas con pasas e higos
también se refocilan, pues son mozos.
El optimismo hace del vino sacado de la barrica,
el mejor de entre los reserva.
brebaje mágico que hace del soso de botica
el mejor barberillo que nunca haya echo la uva.
Al tomar de ese vino, pude ver anoche, en el tranco de la calle,
mientras yo bebía;
que estaba vendiendo cupones un dragón con plumas de águila de valle,
sin dar alcance a lo que veía.
Mantenga bien limpia la solería
y aproveche para invitar a mozas con falda.
en Fuente Ovejuna hay gente humilde y gente a la que mataría,
no hay lugar para los pesimistas ni la espada.
El ser pesimistas nos lleva a enmudecer,
a echar la soga tras al caldero.
los logros de una vida se pueden echar a perder,
en dos credos te sales del sendero.
Festejo tu buen humor ¡Suerte en el concurso!
Que el poema está teñido por el humor es evidente. Que es un lenguaje con sabores antiguos interesante, también. Que el autor debe tener una madurez notable, no hay duda. Pero dicho esto, encuentro que el poema pierde un cuanto a su unidad, pues más parece una sucesión de aforismos populares y con gracejo, de refranes tradicionales, que un poema único. Es cierto que se mantiene ciertos elementos unitarios, pero muy leves hasta el punto de perder la conexión entre los versos. En conclusión, una lectura amena, pero mejorable en los aspectos mencionados.
Te voto con un cuatro y te deseo suerte en el concurso. Aprovecho también la ocasión para invitarte a leer mi poema, el 139 (somos vecinos), y a que dejes allí tu opinión con sinceridad si así lo deseas.
Un saludo.
«el mejor barberillo que nunca haya echo la uva.»
Haya hecho sería lo correcto.
Humorístico texto.Nada más.