Un hombre de poca estatura y traje gris,
De cara rota y cuerpo mutilado,
Sustenta el precio del poder sobre sus hombros.
Con su boca de ceniza muerde el cielo y
Escupe las nubes amargo al frío suelo.
Y en el interior de su vientre abierto
Desgarra lejanos nubarrones.
Con las mejores intenciones,
Este hombre de pobre expresión,
Se convierte en héroe de nuestro tiempo;
Demasiado a menudo.