Estoy en la marmita dela buena suerte .
Un amor no tiene recodo
cabalga en el presagio del ala y dela ira.
Es la hora en que se enloquecen los colores.
Me conviene internarme en el verde pabellón de tu risa.
Por este camino los indispensables
no encuentran el sosiego de las improvisaciones.
Quiero escuchar música que convenga para seguir viviendo .
No me interesa ejecutar
aquel violìn tacaño de una marcha triunfal.
Pequeña olvidada del jùbilo:
ya pasaron varios años para respirar urgente el albedrío .
Quiero proteger mis manìas para proteger el sueño.
Por un ratito boca arriba,
mirar los cielos rasos donde habitan las grandes conmociones
de desgraciadas telarañas provisiorias .
Porque al fin y al cabo,amor
es noche de pizza y plaza.
.Prometernos baladas que no cumpliremos jamás
para zizaguear los canteros de una cierta ignorancia .
Hasta que la hora marque sòlo pizza y plaza
te verè sin concluir la ùltima palabra.
Porque no hay epìlogo para los desarraigados
asì como aquellos que dormitan sobre un viejo diario .