Poemas impuros / TxisKo Mandomán. Por Pilar Gorricho del Castillo

Poemas impuros/ Txisco Mandomán.

Poemas impuros

Txisko Mandomán Xego

Maquetación: Editura Agol 2018

Impresión:SC Mega Print SRL

ISBN 978-606-8715-14-8

821.134.2

   «Poemas Impuros» es el segundo trabajo del poeta y psicólogo por la Universidad de Salamanca Txisko Mandomán Xego que en el año 2013 publicó su primer libro de poemas que lleva por titulo » Desde que hablo solo, nadie me escucha».

   Es miembro del colectivo artístico «El hombre que fue jueves» desde el año 2012 como asimismo lo es Ana Cuaresma encargada del prologar este poemario donde cómo él mismo nos subraya en la contraportada nos adentraremos en esa confesión y testimonio acerca de aquellas cosas importantes que los ojos no ven, o de alguna forma se desvelan inalcanzables.
Van más allá de su literalidad: son parte y todo.

   Me adentro en el universo poético de Txisko Mandomán en la honda convicción de que voy a encontrarme con un circulo expansivo de un poeta de larga trayectoria que transita por el sendero del lenguaje con la transgresión de quien conoce bien la sintaxis poética y el alcance ilimitado del verbo.

   Haciendo referencia al titulo en lo que a poesía compete; este límite sería la «pureza del interiorismo», esa especie de torre de cristal intocable a la que se retira el individuo para separarse del mundo exterior. Un universo de ideas o imágenes sin referencia al mundo. En otras palabras, ese centro al que atribuimos el sentido: la mente del sujeto, que estaría en este paradigma racionalista, situada en el cerebro, y este en la cabeza, de tal forma que ella constituiría el centro rector, racional, que dictaría al cuerpo cómo articularse con relación al mundo exterior.

   Tal como el poeta nos deja entrever en estos versos nadie se encuentra a salvo de esta condición que al cabo, nos humaniza:

   («Es así como llegan las cosas/ en forma de impureza / Somos seres impuros con un jaleo bastante serio, impuro acaso en la cabeza / Señálenme un ser puro, cien por cien existente, aquilatado, y le cantaré hasta quedar ronco/ y lo veneraré en cada uno de mis versos»)

   Txisko Mandomán se dirige al lector sin condicionamientos en un «yo lírico» potente y descarnado; en una poesía dirigida a la vida: vida y creación, poesía y experiencia se confunde en él donde desea captar hasta las últimas de las palabras complaciendo el juego verbal en la alquimia de rozar la palabra hasta quedarse solo con la idea donde el poeta exige al lector un esfuerzo en la lectura de ejercicio espiritual.

El hombre se cuestiona, desdeña el pudor y el tiempo aniquilando relojes, imagina, superpone lo esencial a lo invisible a los ojos.

   El poeta siente y se mueve en un mundo de angustia y también ontológico; colorea el mundo de ilusiones y de sueños anegados por la sinestesia poética generadora de un deseo de alabar el ideal ascético y humanista, cuyo proceso constitutivo es dialéctico. Su canto pone en acción un proceso idílico de ese poeta que “oye”, a pesar de su gran aislamiento del mundo.

   («Tú, no existiendo, me guías por la ausencia sin dueño/ que es el molde todo cuando puedo vivir/

   Tú con un gesto invisible me exhortas a ser libre de mano y obediencia; a ser libre»)

   Refiriéndose a Hölderlin, Martin Heidegger afirma: “El lenguaje no es tan solo un instrumento que el hombre posee también junto con otros muchos, sino que el lenguaje garantiza, en general y ante todo, la posibilidad de estar en medio de un mundo hecho patente. Sólo donde hay lenguaje hay mundo.” y Txisko Mandomán hace alarde de un uso del lenguaje de fuerza arrolladora captando la realidad de su entorno donde es un «punto de fuga» y una reflexión acertada el camino por estos versos de gran belleza al utilizar con una precisión magnifica las rimas internas generalmente asonantes y con un dominio absoluto de los tropos poéticos como la sinestesias anáforas y símbolos.

   («Eres como un bulto que flota sin sentido/ libre de gravedad/ ejerces funerales funciones de planeta.

   Sujeto a alguna enfermedad/ muestras accidentalmente tus males—llegan a la verdad médica—.

   No esperes compasión. Flota / y choca ya esa mano,¡oh, especie dogmática, pentadáctila/ que siguiendo su curso/ ha llegado siempre al mismo cero!»)

   Cito a Oliverio Girondo en su máxima:

   “La poesía siempre es lo otro, aquello que todos ignoran hasta que lo descubre un verdadero poeta”.

   Es el arte lo que me agota, decía Yeats, no la inspiración. Si la poesía es, en primer lugar arte, no puede dejar de ser algo que se construye. El poeta que comienza a escribir su poema debe estar atento a que sí tiene que alejarse de lo que se llama realidad, no puede perder contacto con ella. La llamada realidad nos asalta continuamente, aunque sea una de las infinitas realidades.

   ¿Cuál es la realidad observable? A ella recurre Txisko Mandomán , o dicho de otro modo, de ella parte. La realidad o las innumerables realidades para ser más exactos. Es un «cazador de formas» que puede lograr que en un solo verso exista un mundo de poesía, ya que ésta como práctica humana, es fundamentalmente impura, es decir, está abierta al cambio, a la alteridad y a su ocurrir en el tiempo, y por ende, en la historia.

   Los trazos que el trabajo y la historia humana dejan en las cosas, dan forma a la visión cosmológica que conforman estos 78 poemas impuros de un poeta que no se decanta sufriente por todos, sino que será el propio sufrimiento encarnado en la poesía, como Baudelarie, Mallarmé y los poetas malditos que huyen de los honores, de los fatuos reclamos de los cantos de sirenas, pues han recibido el azote mortal de este dulce veneno que no es otro que eso que llaman poesía.

   Poesía que encontramos en este libro del poeta, del hombre pensante, del hombre herido, del ser humano que succiona la sangre y escribe con ella el ensayo de aquello que damos en dar vida, y lo pasa a limpio en esta colección de poemas.

   Un gran libro para abrir el alma y enaltecer los sentidos con la creación poética en un acto de amor, al que nos invita un verdadero poeta con ansias de conocerse y que lo conozcamos.

Pilar Gorricho del Castillo

pilargorricho

Pilar Gorricho del Castillo, nació en Logroño (La Rioja ) España el día diez de marzo de 1961. Poeta clásica en sus composiciones ha editado tres poemarios y participado en diversas antologías clásicas y de verso libre. Los retazos de mi alma es su primer poemario en Girasoles de asfalto combina el verso clásico con la rima blanca o libre. Y el vacío de los plenilunios todo escrito en verso libre. Cuenta con diversos reconocimientos poéticos. Escribe por satisfacción personal y según sus propia frase: “ No escribo poesía para vivir, la escribo para no morir”.

Un comentario:

  1. Santiago Méndez

    Excelente articulo

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