Yo soy chula,
tela…
Sé que nunca
encontrarás a nadie que
te anegue de amor como yo,
ni que te mande cajas
crecidas de regalos
y de ternura
(de sexo, también).
Sé que a ninguna
le quedarán los vestidos
que eliges
como a mí
y que soy tu mejor
versión
(sí, canalla,
conmigo creces infinito).
Quién te enseñará
de vinos y
te mostrará el camino.
Quién
te subirá al infierno
y te hará
sentir el rey
del Mambo
(del brazo,
como tanto te gusta).
Yo soy chula,
tela…,
pero ahora estoy
echándote de menos
como una niña
perdida
en la ciudad prohibida.
Suerte
que en unos
pocos versos
me haré
adulta
y encontraré
de nuevo
el camino.
Yolanda Sáenz de Tejada
Colaboradora de esta Web en la sección
«Tacones de Azúcar»
Blog de la autora