Recordarte por tu ilustrado aporte a la belleza y a la seducción
es una exclusiva manera de tributar y trasmitir mis deseos y experiencias.
Sinfonía intensa de frases llenan mi boca al percibirte
y mi mente va detrás de un bello rostro que aún no he olvidado.
Puente que conecta las sublimidades del placer
y de la realidad absoluta en colosal proyecto de mujer
que deja atrás a las Evas primigenias.
Secretos y misterios que rodean con túnica tentadora
a una excelsa mujer que todos glorificamos
aún con sus manos llenas de pecados.
Talante de señora que van desde lo tentador
hasta la sublimación del goce
que al pasar de los años no marchitarán su olímpica belleza.
Cada descubrimiento que hago de sus encantos,
azotan mis emociones,
en un escenario exclusivo recordado
en un solo cuerpo y cientos de fantasías
Desafiarte como ser pensante
y gozarte de forma alucinante como ente viviente,
es retar tus modos de juntar práctica,
celo y destreza en cada acto amatorio.
Hombre aturdido y deslumbrado
ante ese bombardeo de atractivos,
espectador empapado en tu identidad
que crece como el trigo en campo fértil
Carisma de mujer que me hace reconocer
el encanto del mundo en su alma,
rostro enérgico y trascendente
como si de él partiera un rayo de sol.
Señora que nunca será pasado,
la conjugo y conjuro en el presente,
por eso, mujer, cuando vuelvas a besar y ser besada,
no dejes de pensar en nuestros besos infinitos, yo, lo hago siempre.
