Icono del sitio V Certamen de Narrativa

146- Tanguneo. Por La mari

Ahora estoy en cama. Sí, sí,  estoy en una cama del Hospital Provincial de Torrevieja…, pero creo que por  poco tiempo. Y es que han pasado  los médicos y me ha  parecido escuchar  que… “ a esta señora de aquí ya no le queda mucho”  luego… pronto en  casa.
También han comentado  sobre mi edad que… “con toda probabilidad su edad ronda los 80 años, y eso si no pasan de…”    ¡Ay Dios! Y no será por la de veces que  les he insistido que  solo tengo 65 añitos  y además  recién cumpliditos en enero… si todo el día estoy con ese lío de la   cosMéTica ¿eh? : si, si   la cosmética:  ese  uso y  uso de  tensores de pómulos, frentes y morrritos… todo para que nuestras arruguillas… si, para que esas pequeñas arruguillas no se noten…  Y es que  esa edad, la edad  que  han dicho los médicos  que yo tengo no me gusta nada, porque a esa edad es cuando  se empieza a  “tangunear” y yo…, yo  no quiero “tangunear”.
Yo, sólo llevo unos pocos días en este hospital, pero ya tengo un pequeño  séquito de  admiradores asiduos.  Yo no recibo muchas visitas de mis  familiares…, pues no los tengo cerca,  pero sí que tengo muchas visitas  de amigos, de admiradores masculinos. Ellos, que son unos mentirosillos,  me  dicen que vienen  a verme porque les doy pena, porque no tengo a los míos….pero si, si, ¿no  será que les gusta  estar conmigo?Yo, contaré aquí  mis  recuerdos  de mis tangu… bueno  del tanguneo que dicen que hice antes de entrar en este hospital.. Diré que  macuerdo que… que  estábamos en el hotel “El duelo”. “El duelo” es el nombre del hotel donde paso  el “invierno”,  pues me traen  todos los años  a eso de mediados  de  octubre, después de la virgen,  y me vienen a buscar en mayo…  El hotel  lo pagan desde casa….los chicos de la “CAJA” ¡Que majos ellos, Ángel y Luis! Sobre todo Ángel, ese  morenito de cara gordita que  siempre me dice.- Petra tu despreocúpate de todo y… ¡a disfrutar!-
Vale, vale, que sí, que  me estoy enrollando. Bueno sigo con lo que estábamos,…estábamos en el hotel y  con ese matrimonio joven., si, ese matrimonio joven  de animadores. Los dos son muy jóvenes, tan jóvenes que entre los dos no llegarán ni al medio siglo… sí, esos que son  cantantes y hacen fiestas…animadores ¿verdad?  

Pues  EL, qué es tan amable…   ella no,  ella es distinta, es… bueno  muy seria, pues  siempre  anda con dos arrugas en la frente y  que parece que  todo le sienta mal… pues  eso que  EL  siempre me pregunta con mucha amabilidad  que qué tal estoy…. pero  ella se enfadada  también siempre  y  le dice,  en voz bastante alta,  no le preguntes nada,  que a nadie interesa cómo están  estas “señoras” que…   luego  no hay forma de despegarse de ellas…  ¡que ingrata!

EL se llama  Alan  y ¿ella?  Hummm,…pues ahora  no me acuerdo,  pero creo que se llama… bueno ¡da igual!. Que sí, que  ya voy, que voy a seguir con la historia de “mi tanguneo”, que sí.

Que  una tarde,  macuerdo  que  aún no se había puesto el sol y que estábamos jugando a las cartas Julián, mi  amigo de ahora… sí, sí,  ese chico de Mataporquera, viudo que tiene  tan buena planta…,sí, ése; Bueno pues estábamos con  Celia y su marido; el  hombrecito menudo  que siempre tiene frío… Bueno, pues sin acabar la partida, Celia  se fue en busca de una mantita para las rodillas de Jesús, su marido, el hombrecito del frío…y se nos acercó Alan muy  amable,  tan amable como siempre y se ofreció a sustituir a Celia, que era mi compañera  al tute…,  pues siempre jugábamos así: ¡Chicos contra chicas!… y ya  yo no  macuerdo de más…pero  me han contado que… sin mas ni mas me quedé como  alelá, como distraída,   rara,  y  dicen, pero que yo no me lo creo…que  allí mismo  empecé a   “tangunear”.  ¡Menos mal que no me lo creo.! ¡yo tangunear! ¡qué vergüenza mas grande, Dios mío!.

También   macuerdo de otro día, que  después de venir de la playa, entrábamos al “holl” del hotel. Iba yo monísima,  con mi batita floreada  de piqué, esa que me compré en los tenderetes… y el turbante azul  turquesa,  que me va a juego con la bata y con el color de mis ojos y… y conmigo venía  Celia, que  estaba también  bastante mona, y  al entrar en el saloncito del hotel vimos  una fiestecilla,  y… nos acercamos las dos a  fisgonear un poquillo  y  digo que sólo macuerdo que  para cuando  Alan  pidió una voluntaria. para bailar el “quijongo”…  yo ya estaba  en el escenario  y …sí creo que tanguneé un poco… pero un poquillo sólo ¿eh?… Muy bajito creo que le tanguneé a Alan. 

Y de lo que sí macuerdo, pero que muy bien  es de  que   la chica  de las dos arrugas en la frente, esa  se llamas…hummm que se llama… bueno que ésa que no me acuerdo cómo  se llama., se acercó  y tiró de mí para separarme de  “ÉL”. Yo, claro, me  resistí  y  me agarré  a Él con  tanta fuerza  que…  que lo siguiente … es esto: cama, hospital  y visitas de muchos amigos.

Hoy me he pintado los labios  y las uñas…y es que  “tangun  pálpito de que viene a visitarme mi hijo Xabier o …¿es mi nieto Xabier?,  pues  he de confesar que “tangun hijo que se llama Xabier que se parece mucho a Alan, o ¿es mi nieto  Xabier ?  …bueno , da igual, pero hoy estoy  muy  guapa ¡fijo!.

Notas aclaratorias:

Tanguneo: expresión   propia de jubilados de la tercera edad. Ejemplo: en  Torrevieja   es muy correinte escuchar  en   una conversación entre mayores de 65 años … las siguientes expresiones: “tangun piso…” “tangun  hijo…”, “tanguna casa…..” “tangun dolor”….

 

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